martes, 20 de enero de 2009

EL TRABAJO URBANO Y LA ANTROPOLOGIA DE HOY: MI REFLEXIÓN


Este trabajo está realizado como resultado de la consulta de información tanto en Internet como de un libro. Sinceramente no puedo relacionar esta información que encontré, por mi ausencia en el segundo foro interno sobre trabajo de campo. Sin embargo, mi propósito principal es analizar como se da el trabajo urbano, la importancia que este tiene y las problemáticas que debe de enfrentar; así también como algunos puntos requeridos para la realización de este ensayo.

Yo pienso que el trabajo urbano ha podido abrir nuevas alternativas de estudio, contrastantes a los temas, grupos y comunidades a los que comúnmente se les llama tradicionales. El trabajo urbano nos permite conocer no solamente diferentes formas de vida que en ocasiones nos parecen desconocidas o raras, sino que nos permite reflexionar, conocer a profundidad y observar espacios y actividades cotidianas. Por ejemplo, el lugar de trabajo, de escuela, de centros recreativos, o conocer acerca de diferentes asociaciones religiosas, políticas o sociales, etcétera.
Un trabajo urbano nos permite también esclarecer cuales son los factores negativos que no permite el buen funcionamiento de las dinámicas sociales, y que con ello se pueda contribuir en dar solución a problemas relacionados con la salud, vivienda, educación… podríamos ejemplificarlo de la siguiente manera: Existe una confusión de cargos religiosos en la parroquia del centro de Tlaxcala, en donde ninguno de sus integrantes se pone de acuerdo para asumir el rol que le corresponde; en fin, es solicitado un antropólogo social para descubrir el gran dilema que aturde a cada uno de los integrantes de aquella asociación. El antropólogo como inicio, debe consultar archivos históricos-religiosos para conocer cuál fue el rol de cada mayordomo o representante y hasta que momento estos roles cambiaron y si fue así. Podría también entrevistarse con personas claves o que en tiempos anteriores estuvieron a cargo de estos puestos o incluso con los sacerdotes que estuvieron en esa parroquia y tratar así de obtener información relevante que le ayude a conocer la confusión de los papeles y funciones dentro de esta organización religiosa. En este ejemplo también podemos encontrar unos problemas: en un pueblo es más fácil obtener datos tanto escritos como hablados porque regularmente en estos lugares las costumbres y tradiciones duran mas, mientras que en la ciudad por la gran diversidad de ideologías y tradiciones, estas últimas se van transformando hasta formar nuevas costumbres y maneras de manejar, en este caso, las funciones de los representantes de la iglesia.

Como ya toque el punto de los problemas que enfrenta la antropología, proseguiré en este camino. La antropología hoy en día enfrenta problemas tanto conceptuales como metodológicos. Cada vez que me preguntan qué es lo que estoy estudiando y al saber siempre me dicen: “¡a que bien! Entonces vas a estudiar mis huesitos” o “ya te veré descubriendo dinosaurios”… a veces me esfuerzo por sacarlos del error pero otras veces nada mas les sonrío (ya se que está mal, y se también que por eso la antropología tiene problemas de identidad porque los que estamos a dentro de, no ayudamos)
Por otra parte, en lo referente a la cuestión metodológica, no se escapa de encontrar y de enfrentar diversos problemas, tales como de aceptación, de selección de la información (ética profesional), de pérdida de documentación escrita o de informantes claves, de obtención de información de temas complicados y problemas con la cuestión de la subjetividad y la objetividad.
En el caso de aceptación, los antropólogos tienen la difícil tarea de lograr que los habitantes de un determinado lugar te vean como parte de, y se acostumbren a tu presencia hasta que ya no la noten. He escuchado de algunos pueblos que son muy cerrados ideológicamente y que ya no aceptan que fácilmente los vayan a estudiar, incluso a veces cuestionan al antropólogo para saber cuál es el beneficio que ellos obtienen por ser estudiados.

Al obtener mucha información, se debe de hacer una selección de lo que se va a mostrar en el trabajo, para lo cual no es tarea fácil. Pienso que esto va relacionado con la ética porque al conseguir información de los lugareños, a veces van implícitas cuestiones personales o de otras personas, entonces pienso que parte de la ética es no afectar moral ni socialmente a las personas (si se trata de una cuestión negativa) y ni mucho menos de ponerlos en evidencia, por lo tanto, parte de esa selección de información lleva consigo en cómo ésta se va a manejar, de manera que la exposición de la información sea importante y lo más apegado a la realidad.

Algo que nos diferencia de otras ciencias como la historia, es que la antropología trabaja con la gente , trabaja con los relatos que esta cuenta y con sus percepciones de la realidad. Algunas veces cuando se trabajan con personas de mayor edad, es probable que se olviden de ciertos acontecimientos claves dentro de las dinámicas sociales, ya sea por enfermedad o porque simplemente no las recuerdan y se olvidan. Otra desventaja que se tiene es que la vida del hombre es muy corta y uno solo no puede observar los hechos y cambios sociales a través de muchas generaciones; también como parte de la vida, las personas claves fallecen dejándonos sin la información que ellos poseían. Dentro de estas pérdidas, encontramos a los archivos históricos, ya sea porque alguien pensó que no tenía utilidad y los destruyó, o por accidentes de fenómenos naturales o provocados… sin ellos nos perdemos gran parte de la identidad de los pueblos que difícilmente podemos conocer mediante la historia oral.

Con relación a los temas que tienen una dificultad para obtener información, están los que no tienen un registro histórico o en donde la información se debe de quedar dentro de un núcleo social determinado. Hace 2 meses, un grupo de compañeros y yo tuvimos que hacer una trabajo acerca de la santa muerte. Nos encontramos con dificultades porque al ir a un templo dedicado al culto de la santa muerte (centro histórico de Puebla) quisimos tener una entrevista con las personas encargadas del lugar, como respuesta obtuvimos evasivas, ni nos decían que si nos iban a atender o no, solo nos decían que en ese momento no tenían tiempo. Al ir a otro templo, en este caso la respuesta fue un rotundo no, pero nos hicieron una invitación para asistir a una de las misas y la señora que nos atendió nos dijo que podíamos grabar la misa y después de ella conseguir algunas entrevistas de los fieles; lo que la señora nos dejo muy claro es que tampoco podíamos tener una entrevista con el “sacerdote” porque a los únicos que les otorgaba una, era a la prensa importante y eso dependía de las preguntas que le hicieran. En este ejemplo pude darme cuenta lo difícil que es obtener información y sobre todo la forma en como acercarte a la gente, ya que al ver nuestra cámara de video cuando le pedíamos una entrevista, se rehusaba al miedo de que utilizáramos esa información para otra cosa; por otra parte también observe la importancia que tiene nuestra memoria en estos casos, porque solo escuchando la gente accedía a platicar contigo y al desarrollar nuestro trabajo, tuvimos que recurrir a la memoria para la reconstrucción de las frases y darle el sentido en el que la persona lo dijo.

A lo largo de mi corta estadía en el colegio de Antropología Social, se ha hablado mucho de la cuestión subjetiva y objetiva, en donde la primera es la percepción personal que se tiene de algo y lo objetivo es ver las cosas desde un punto de vista un tanto frío, es decir sin mezclar ideologías, posturas, ni sentimientos para ver las cosas tal como son.
En una de las clases de esta asignatura, hablábamos acerca de que la objetividad en las ciencias sociales, en especial en Antropología, es muy difícil de conseguir y que casi siempre las posturas son subjetivas; con respecto a esto yo pienso que si es difícil obtener una postura objetiva, ya que cada uno de nosotros estamos influenciados por factores sociales, culturales, políticos y hasta veces religiosos con raíces fuertes que nos dirige siempre a relacionarlos estrechamente con las dinámicas sociales de los pueblos que estudiamos, y hasta a veces creer que nuestras prácticas e ideologías son mejores que otras. Claro no estoy generalizando, pero si pienso en lo difícil que es, sobre todo para uno como estudiante que no tiene las bases suficientes para llegar a lo más cercano de la objetividad.

Para finalizar con el tema de trabajo urbano, puedo decir que también ayuda para entender lo opuesto: la vida del campo o pueblo de las grandes urbes.
Recordando otra vez una de las clases, uno de los compañeros dio un ejemplo del contraste que él observaba de su lugar de origen a la ciudad (en este caso Puebla) y mencionaba que en su pueblo los jóvenes se casaban a una temprana edad y que por el contrario, en Puebla no lo veía tan común (porque obviamente también hay casos de matrimonios o de uniones jóvenes) En mi caso también lo he observado, no tanto en mi lugar de origen, sino del de mi mamá, quién es originaria del Estado de México. Desde que yo tenía 19 años, para los habitantes de la ranchería de San Martín Obispo, ya era una “quedada”, y si yo viviera allí, así sería porque todos los jóvenes entre 15 y 21 ya estaban casados y con hijos. Yo observo este contraste en el sentido de la educación; los jóvenes hombres de esta ranchería apenas si llegan a terminar la preparatoria y dejan sus estudios, a veces no tanto por cuestiones económicas sino porque ya no quieren seguir estudiando y prefieren dedicarse a trabajar en los camiones. En el caso de las mujeres, ellas estudian hasta que no lleguen encuentren el “amor”; por otro lado en la ciudad, he observado que la mayoría de los jóvenes se inclinan por tener una licenciatura, sobre todo las mujeres. Como este y muchos ejemplos más podemos encontrar sobre estos estudios urbanos.

Puedo concluir diciendo que la antropología en nuestros días ha ido abarcando mayor campo de estudio y que sobre todo este ayuda a resolver problemas que se presentan en nuestra vida diaria. Pienso que la antropología nos ayuda a ver una realidad diferente, a ser más consientes de lo que pasa a nuestro alrededor, y que a pesar que esta ciencia pasa por una crisis de identidad y de campo laboral, aporta cosas muy importantes que a la sociedad le es útil: visión y conocimiento.
También puedo darme cuenta que no es necesario salir a lugares muy lejanos para poder realizar un estudio antropológico; sobre todo esta es una buena opción para nosotros los estudiantes de Antropología, que no contamos con el dinero suficiente ni con un financiamiento de parte de la universidad para nuestras prácticas de campo en otro estado de la república. Y si buscamos ventajas puedo mencionar que no nos alejamos de la comodidad de nuestra casa.

1 comentario:

  1. Tú trabajo me fascino, se nota claramente que tú trabajo tiene muy buenas bases y conocimiento previo, aunque te faltan algunas cosas, espero luego podamos discuutirlas.
    Saludos Mauro.

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